Capítulo 49

Hola a todas! Hoy sí volvimos, y con la maratón que hacía tanto pedían! Espero que les guste!!! Más tarde subo el otro de hoy, y mañana sigue!!

Capítulo 49:
Lo que les dijo Cielo los deprimió a todos un poco. Porque era un recordatorio de que la paz era limitada. Y que los problemas siempre acababan llegando, por más que uno los quiera atrasar.
Ahora, había otra cosa que les preocupaba mucho: Cielo dijo que había alguien dentro de ellos que estaba infiltrado. Pero, quién? Tenían a muchísimos alumnos dando vueltas todos los días en el colegio, cómo encontrarían al culpable?
Además, otro oscuro presentimiento acechaba en la mente de Mar, pero no lo quería decir por miedo a equivocarse. Y era tan terrible que ni siquiera ella quería pensar que fuera verdad, aunque lo sentía a flor de piel. Ella creía que había un infiltrado dentro de la familia. También eran muchos, pero si llegaba a ser alguien entre ellos sería su perdición. Cómo culpar a un hermano, primo, tío, sobrino de querer matarlos?
Mar: Estoy muy preocupada
Thiago: Por?
Mar: Por todo lo que contó Cielo. Y si pasa algo?
Thiago: Mar, tuvimos que atravesar situaciones peores que ésta. Vamos a estar bien
Mar: tengo un mal presentimiento
Thiago: Mi amor, no te preocupes
Mar: No pero es de verdad! Siento que algo malo va a pasar. Algo muy malo
Thiago: Malo como qué?
Mar: Siento que todo ésto va a terminar de la peor forma… cuando alguno muera
Thiago: Mar, no digas eso
Mar: pero es así como lo siento, Pela. No es de pesimista. Pero creo que algo va a pasar, algo que nos va a traer muchos problemas
Thiago: Bueno, vamos a hacer una cosa. No sigas pensando así, que te va a hacer mal. Yo te prometo que no va a pasar nada. Vamos a estar bien, todos. Solo hace falta cuidarnos un poco.
Mar: Ojalá sea solo así. Nunca vamos a poder estar tranquilos?
Thiago: Creo que la tranquilidad no es lo nuestro
Y cuando Thiago terminó de decir esa frase, un fuerte golpe se escuchó en la planta de abajo de su casa, seguido con un ruido a vidrios rotos. Y por supuesto, luego vinieron los gritos, culpando a alguien, llorando porque se lastimaron, o algunos peores
Mar: Definitivamente, no es lo nuestro
Mora: Fue Santino esta vez!
Santi: Mentira!
Mar: Qué rompieron?
Mora: Nada, una pavada
Mar: Mora!! Los voy a matar!
Thiago: Qué pasó?
Mar: Rompieron el cuadro que colgaba de la pared!
Santi: Fue un accidente!
Thiago: Cómo rompieron eso? Si estaba alto!
Mora: Santino tiró la pelota y…
Santi: No me culpes a mí, que los dos estabamos jugando!
Mar: Van a buscar la escoba, barrer todos los vidrios y después van a ir a comprar un cuadro nuevo
Mora: No! Tengo que ir a…
Thiago: Dónde te tenés que ir?
Mora: Nos juntamos con las chicas
Mar: Irás un rato más tarde, porque antes van a ir los dos a reemplazar lo que rompieron. Y no los quiero volver a ver jugando con la pelota acá adentro, se entendió?
Santi: Sí ma. Perdón
Mora: Dejá de pedirle perdón, no seas chamuyero
Santi: Vos porque nunca pedís perdón de nada
Mariana: Mamá! Podés venir a ver la coreo que armé?
Mar: Ya voy! No seas tan mal llevada mi amor, sí?
Thiago: No sé a quien habrá salido
Mar le lanzó una mirada recriminadora a Thiago, quien le respondió con una sonrisa. Se alejó para ir a la sala de ensayos, pero no pudo hacer ni dos pasos que ya escuchó que Mora y Santino peleaban de nuevo. Suspiró, pero una pequeña sonrisa asomó de su cara. Los días pasados de esa forma deberían ser eternos, pensó.