Capítulo 103

Y ahora sí, terminamos con la maratón!! Mil gracias a todas por acompañarme, y a las chicas de mi grupo, que me reventaron la cabeza para que suba! Las quiero!!!
Ahora van a tener que esperar hasta el jueves para un nuevo capítulo!! Las vos ya extrañar!! Besos y disfruten mucho! Y gracias de nuevooo!!

Capítulo 103:
-Dió la orden de entrar, vamos!
Vale: Chicas tengo que ir al baño, no aguanto más
Tefi Rápido! Que yo no terminé
De repente, la ventana se abrió, y dos hombres con armas entraron- Tefi gritó
- Quietas todas!!
Por supuesto, Tefi volvió a gritar
-Callate! Todas al suelo, ahora
Mar: Tranquilo, y bajá el arma
-Al suelo dije!!
Todas hicieron lo que les decían. Vale volvió del baño, y vió a los dos hombres de pie. Mar le hizo una seña con la cabeza, y ella salió corriendo. Hubiera podido atacarlos con algo, pero estaba embarazada y era peligroso para su bebé.
Corrió a buscar a los chicos, pero ahí se encontró con que también había hombres amenazándolos. Sintió una mano en su boca, y que alguien la arrastraba hacia atrás.
Pero se relajó al ver a Rama ahí
Rama: estás bien?
Vale: Sí. Qué pasa?
Rama: Son gente de Juan Cruz.Vení, vamos a buscar al resto
Pero antes de poder seguir avanzando, sintieron una pistola contra su cabeza
-Se paran despacio, y me siguen
15 minutos después, ya tenían a todos atados en la sala de ensayos
Mar: dónde están los chicos?
Nignuno de los ahí presentes le contestó
Jaz: Dónde están?
-Donde no les importa. Ahora se quedan tranquilos hasta que llegue Juan Cruz
Después de mucho intentar soltarse, se dieron por vencidos. Un rato después, Juan Cruz llegó
Juan Cruz: Qué lindo es ver a todos reunidos acá
Nico: Qué querés ahora?
Juan Cruz: Visitar a mi familia
Cielo: Nosotros no somos tu familia
Juan Cruz: Ustedes no. Pero tengo a mis dos hijos acá
Camilo: No somos tus hijos
Juan Cruz: Sí lo son. Mis hijos, mis nietos… eso es familia, no? De paso, me enteré que tengo dos nuevos nietos. Por qué no me avisaron?
Thiago: Ni se te ocurra acercarte a ellos
Juan Cruz: Solo los quiero conocer. Que mal eso de no decir nada… igual, me parece bastante apresurado
Thiago: No te da la cara para decir algo así
Juan Cruz: No es mi culpa que ustedes sean unos irresponsables
Mar: Te voy a matar!
Juan Cruz: Marianegra, siempre tan peleadora
Mar: Ni te acerques a mis hijos, porque te mato
Los chicos estaban atados, todos juntos con varias sogas. Tacho sintió que sus nudos comenzaban a aflojar. Se dió vuelta, pero no había nadie. Hasta que pudo soltarse.
Entonces, hizo lo mismo con Kika, a quien tenía al lado. Y así, poco a poco, todos fueron soltando sus manos.
Cuando todos estuvieron libres, sabían que debían saltar. Pero había 10 hombres con armas, apuntándolos.
Cuando, de repente, los hombres soltaron sus armas, y cayeron al suelo, como si los hubieran golpeado.
Reaccionaron enseguida. Algunos levantaron  las armas del piso, mientras que otros se encargaban de desmayar a los guardias. Cielo se acercó a Juan Cruz, pero al querer tocarlo, se desvaneció. El cuerpo de Juan Cruz no estaba ahí, era solo una imagen de él. Pero sabía que estaba cerca.
Pocos minutos después, ya habían desarmado a todos los guardias, y los estaban llevando afuera de la casa.
Encontraron a los más chicos en otro cuarto, también vigilados. Pero era un solo hombre, y no les costó desmayarlo.
Ya más tranquilos todos, por fin pudieron hablar
Cari: Alguien me explica que pasó?
Tacho: No creo que hayan tirado las armas solos
Cielo: No, no lo hicieron. Ustedes no los podían ver, pero yo sí
Thiago: Ver a quienes?
Cielo: Entre nosotros había personas, varias personas, que se encargaron de salvarnos hoy. Ellos desarmaron a los guardias, evitaron que el espejo cayera sobre las chicas y que Tacho se electrocutara
Rama: Pero quiénes son?
Cielo: Aliados. Personas de otro mundo, que están para protegernos. Pero hay algo que me preocupa
Kika: Qué?
Cielo: Juan Cruz quería algo, estoy segura. No va a venir solo para ésto
Simón: Y qué quería?
Thiago: El libro
Nacho: Qué?
Thiago: El libro. El libro, Mar
Mar: Qué libro?
Thiago: Mar, el libro!
Mar: Tenés razón. Juan Cruz quiere el libro