Capítulo 123

Capítulo 123:
Noviembre, 2019
Mar: Buen día, hermosa! Sabés qué? Hoy es tu cumple! Un añito, eso es muy poco. Y van a tener una fiesta enorme!
Mariana rió ante las palabras de su mamá, pero dudaba que entienda algo de lo que decía
Mar: Vamos a despertar a tu hermano?
Mar dejó a Mariana en la cuna de Juampi, y ella se encargó de casi arrojarse sobre él. Pero ambos reían sin parar cuando lo hacían. Juampi se despertó, miró a su hermana y luego a su mamá, y le sonrió, como todas las mañanas. A Mar la mataban de amor. Entre ellos eran tan unidos que hasta a veces sorprendían, porque tenían solo un año, pero entendían todo a la perfección. Y hacían todo juntos.
Mar: Hola mi amor! Feliz cumple para vos también! Qué hermosos que están…
Mora: Mami!!!!
Mar: Hola, chiquita! Viniste a saludar a tus hermanos?
Mora Sí! Feliz cumple
Mar: Igual no creo que te entiendan, mi amor
Mora: Por?
Mar: Porque cumplen un año apenas, y todavía no entienden qué es un cumpleaños
Mora: Entonces me puedo quedar con sus regalos?
Mar: No!
Mora: Pero si ellos no saben!
Mar:Igual, son sus regalos. A vos ya te dieron para tu cumple
Mora: Está bien. Pero los puedo ayudar a abrirlos?
Mar: Eso sí. Querés ir a despertar a tu papá?
Mora: Sí!!!
Mar y Mora, junto con los mellis, se dirigieron a su cuarto, en donde Thiago dormía profundamente. Mora soltó una risita, y con un asentimiento de la cabeza de Mar, tomó impulso y se arrojó en la cama. Thiago se sentó de un golpe, sobresaltado, y mirando a su alrededor.
Ni Mora ni Mar pudieron aguantar ese momento, estallando ambas en risas. Thiago, que no entendía nada al principio, las miró con cara de enojado. Pero ellas seguían riendo sin parar
Mora: Buen día, Pa!
Mar: Cómo amaneciste mi amor?
Thiago: Casi me da un ataque, pero el resto bien
Mar y Mora se miraron, y volvieron a reír. Pero esta vez, Thiago se sumó a ellas
Mar: Tendrías que haber visto tu cara
Thiago: Que graciosas son. Ya van a tener su venganza
Mora: Papi, no saludaste a los mellis!
Thiago: Y si vos me despertaste a los golpes!
Mora: mamá me dijo!
Thiago: No me extraña
Thiago le hizo señas a Mar para que se acercara con los bebés upa. Los dejó en la cama, y enseguida comenzaron a gatear por todos lados. Aún no caminaban, pero por lo menos lo intentaban
Thiago: Feliz cumple, mis amores!
Mariana lo miró y le sonrió. Juampi estaba bastante entretenido jugando con las sábanas. Thiago tomó a Mariana en brazos y comenzó a hacerle cosquillas y a llenarla de besos, a lo que luego su hermano se sumó.
Mora: Mamá dice que no entienden que es su cumple
Thiago: No, todavía son chiquitos. Vos tampoco entendías
Mora: Sí, yo sí entendía
Mar: No te podés acordar, mi amor
Mora: sí, yo me acuerdo de todo
Mar y Thiago se miraron, intentado ocultar las risas. Mora se enojaba mucho cuando se reían de algo que dice.
Y como siempre, horas más tarde, la casa ya estaba a punto de reventar de la cantidad de gente que había, todos para saludar a los cumpleañeros, por supuesto.
Ellos jugaron toda la tarde en el patio, gateando detrás del resto de los niños, que corrían por todos lados.
La noche llegó, y con ella, el cansancio. Habían recibido gente todo el día, lo que dejó agotados a cada uno de los integrantes de la familia. No tardaron casi nada en ir a dormir. El día que les esperaba al amanecer lo recordarían para siempre.