Capítulo 38

Ante último capítulo de hoy! Espero que les guste!!

Capítulo 38:

Al día siguiente, amaneció algo gris y frío. Pero por suerte, Tefi, al ver el estado del clima, planeó muchas cosas para hacer en la casa

Thiago: Mar, despertate! Nos están esperando

Mar: Qué?

Thiago: Sí, tu hermana no tuvo la mejor idea de organizar cosas a la mañana. Y ya vino tres veces a golpear la puerta para que nos levantemos

Mar: De verdad? Yo no la escuché

Thiago: Estabas bastante dormida, mi amor

Mar: Sí, anoche me desmayé

Thiago: Dormiste bien?

Mar le dedicó una sonrisa somnolienta

Mar: Mejor que nunca. Vos?

Thiago: Nunca se puede dormir mal, si te tengo a vos al lado

Mar: Pela, estás hecho un dulce? A vos te pasó algo?

Thiago: Sí, me casé con el amor de mi vida. Eso me pasó

Mar:  De verdad, me voy a  morir. Sos un tierno. Pero ahora vamos, que Tefi nos va a matar

Thiago: Sí, mejor vamos. Esperá! Me olvidé de algo!

Mar: Qué?

Thiago se acercó a ella y la tomó por la cintura

Thiago: Buen día, princesa

Mar: Buen día, mi amor

Thiago: Te amo

Mar: Yo también te amo

Y dicho esto, se besaron por un largo rato, y con mucho esfuerzo se separaron, ya que si seguían así iban a llegar muy tarde

Esta vez, Tefi había organizado actividades como clases de baile, concursos de canto, y el que más les gustó a todos, un gran juego de escondidas por toda la casa. Obviamente, tenían que ser buscados por Mar y Thiago. Luego del juego, y argumentando que era su último día ahí, entre todos los chicos se pusieron de acuerdo, y de repente, tomaron a Mar y a Thiago, y los llevaron afuera. Al principio ambos reían, pero cuando vieron que se acercaban al lago, las risas pasaron a ser gritos y patadas. Pero no pudieron soltarse. Finalmente, terminaron los dos zambullidos en el agua del lago, que estaba bastante fría, por cierto.

Esa misma tarde todos partirían de vuelta a sus casas, para seguir con sus rutinas habituales. Y Mar y Thiago comezarían oficialmente su vida de casados. Algunas cosas iban a cambiar. Ahora todo tenía que ser de ambos. Estaban muy emocionados por empezar esa nueva etapa de su vida

Mar: Bueno, me escuchan un minuto, por favor? Ya que es nuestro último día acá, quería hablarles a todos juntos. Primero, agradecerles muchísimo por haber venido. Significa mucho para nosotros que estén acá, acompañándonos. Sepan que todos nuestros invitados están acá porque de verdad los queremos mucho, y queríamos compartir este gran momento por ustedes. Fue un poco inusual, lo sabemos, pero así somos nosotros, atípicos. Así que espero que hayan disfrutado de todo, y gracias por estar acá

Thiago: Bueno, creo que a mí no me queda mucho que decir. También, agradecerles por todo, es un momento muy especial para nosotros. Creo que yo voy a hacer los agradecimientos puntuales. Primero y principal a mi ahora cuñada, que fue la encargada de dejar este lugar tan lindo en muy poco tiempo, y además de organizar las actividades. Tefi hizo un trabajo perfecto estos días. Después a todos nuestros amigos y familia, por ayudarnos tanto a último minuto, y por apoyarnos siempre. A todos ustedes, por estar acá, y hacer que estos días sean tal cual lo habíamos soñado. Y por último, a mi bellísima esposa, por hacerme tan feliz.

Un suspiro general se escuchó en la sala cuando Thiago pronunció estas últimas palabras, y el más profundo fue el de Mar,y luego lo siguieron muchos aplausos y vítores. Todos los presentes comenzaron a pedir un beso, lo cual cumplieron.

Después, todos brindaron por la pareja.

Luego de mucho insistir, Tefi logró su objetivo. Mar aceptó arrojar su ramo de flores. No lo habían hecho en la fiesta porque Mar argumentó que era para problemas. Pero su hermana insistió tanto, y además quiso hacerlo por ella. Así que Mar se paró en lo alto de las escaleras, y todas las mujeres invitadas se pararon debajo. Mar contó hasta tres, y arrojó el ramo hacia atrás. Este fue a parar en manos de, nada más y nada menos, que Jazmín. Esta le sonrió a Mar desde abajo, y Mar hizo lo mismo.

Recordarían esos días como los más felices de sus vidas. Rodeados de amigos, con mucho amor, muy contentos, y llenos de paz. Porque los días siguientes, serían verdaderamente un infierno.